El flamenco es un género artístico de origen popular nacido en Andalucía hace más de dos siglos, como resultado del encuentro entre las culturas cristiana, judía, árabe, afroamericana y gitano-andaluza.
Expresión cultural en constante evolución, se manifiesta, principalmente, en tres modalidades: cante, baile y toque de guitarra, a partir de estructuras estilísticas denominadas palos, que se diferencian por aspectos como el carácter, el ritmo, la copla o la melodía.
En cuanto al baile flamenco, podemos definirlo como la expresión artística del flamenco mediante la danza y que, además de poseer una técnica y una estética propia, está caracterizado también por ser un baile individual, introvertido, explosivo, espontáneo, sincero, de tendencia extática y manifestación abstracta.
A pesar de tener un origen incierto, por carecer de documentos, podemos clasificar la evolución del arte flamenco en tres etapas principales:
- Etapa primitiva: ? – 1860 aproximadamente (Primeras referencias)
Se comienzan a estructurar, definir y divulgar los cantes flamencos fundamentales. El baile era una distracción, se bailaba por desahogo y como entretenimiento. No obstante, a principios del siglo XIX nace una oferta semiprofesional y comercial del arte andaluz y gitano.
- “Edad de Oro”: 1860 – 1920 aproximadamente (Cafés cantantes)
El flamenco cobra un auge extraordinario y se propaga su afición por todas las ramas de la sociedad española. Comienza a ser un arte profesional: se fijan los estilos, el ritmo y los cánones que habrán de perdurar, con mayor o menor evolución hasta nuestros día.. Surgen los “Cafés cantantes”, antecesores de los actuales tablaos.
- Etapa teatral: 1920 – Actualidad (El arte flamenco aparece en los escenarios teatrales) Contiene a su vez, tres períodos:
Opera Flamenca: 1920 – 1955
La denominación “Opera Flamenca” se debe a una argucia empresarial para conseguir beneficios tributarios para los espectáculos flamencos.
En esta época la inspiración popular cede el paso a una elaboración intelectual con fines coreográficos, el flamenco se deforma en aras de un público menos exigente y se sustituye el acompañamiento de guitarra por orquesta.
Renacimiento: 1955 – 1985
Supuso la definitiva revalorización del flamenco y consiguió rescatar todo lo marginado y relegado de la etapa anterior. Aparecen los tablaos, así como numerosos eventos periódicos relacionados con este arte (festivales, concursos, certámenes, etc.).
Época contemporánea: 1985 – Actualidad
El flamenco continúa su progresión ascendente y se realizan numerosas “fusiones” experimentales con otras artes como el jazz o la danza contemporánea. Cobra un gran prestigio internacional y acapara, de manera creciente, la atención de artistas, público y estudiosos de todo el mundo.
Desde sus orígenes hasta la actualidad, son muchos los intérpretes y múltiples los estilos de este arte universal, tan conocido y a la vez tan enigmático. Una manifestación liberadora que llega y conecta con el ser humano en su generalidad. Un arte vivo y creciente, abierto a cualquier expresión o gesto de cada uno de nosotros.
Bibliografía:
“Teoría y práctica del Baile Flamenco” de Teresa Martínez de la Peña.
“El Baile Flamenco, una aproximación histórica” de José Luis Navarro y Eulalia de Pablo.
“Etapas históricas del Flamenco” de Pepa Sánchez